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Calibraciones en temperatura
Un instrumento de medición de mercurio es un tubo alargado hecho de material de cristal. Dentro suyo contiene mercurio, que se expande en el momento en que se le acerca a la temperatura, llevando hacia arriba, donde las condiciones son similares a un vacío.
Gracias a las características dañinas del mercurio, que es el único metal que se ve en forma líquida en condiciones normales, la Unión Europea decidió el 3 de abril de 2009 eliminar absolutamente el mercurio, pero esto no quiere decir que no se prosigan utilizando en muchos hogares. Sin embargo , se debe tener mucho cuidado al tomar la temperatura, especialmente con los bebés.
La forma de utilizar un termómetro de mercurio es dependiente de dónde se desee medir la temperatura. En todo caso , el gadget debe agitarse antes de cada empleo de tal manera que la lectura sea de 35,6 grados. Si se toma la temperatura bajo la axila, el termómetro de mercurio debe presionarse tenuemente , pero no tan fuerte para que el instrumento no se rompa. Si la temperatura sobrepasa los 37,5 grados, se dice que hay fiebre. Un nivel entre 36,6 y 37,5 indica un estado subfebril.
Asimismo cabe la posibilidad tomar la temperatura en la boca. Adecentar los capilares con alcohol salicílico o alcohol de quemar antes de emplearlos. La temperatura en la boca es de unos 36,8 grados. La fiebre se señalará sobre los 37,5 grados.
La toma de temperatura más exacta se obtendrá midiendo la temperatura rectal. Este método podría recomendarse para los pequeños que no tienen la oportunidad de sostener el gadget apropiadamente en la boca o bajo la axila.
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